Iluminar productos frescos con LED es adecuado porque no emite luz infrarroja además de producir poco calor, evitando su envejecimiento prematuro. Es decir una iluminación correcta garantiza una buena visualización y conservación del producto.
El parámetro que más influye en la presentación de los productos frescos es el color. Resaltando los colores naturales, el producto exhibe una imagen fresca y atractiva.
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Iluminación en frutas y verduras
Una iluminación limpia y brillante aporta un ambiente refrescante, utilizar una luz blanca resaltara su color natural.
Sin embargo no todos los vegetales reaccionan a la luz de la misma manera, algunos productos son sensibles a la luz como los tubérculos. Por lo tanto estos productos deben mantenerse alejados de la luz para evitar que su calidad se deteriore.
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Iluminación en carnes
Los clientes se basan en el aspecto de la carne al ponderar la frescura y la calidad de la misma. Cada producto necesita su propia solución de iluminación para realzar su frescura y atractivo. Está demostrado que una luz cálida de color blanco con un sutil brillo rojo resaltara lo mejor de la carne.
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Iluminación en pescado
El pescado debe mantenerse frio en todo momento, por lo tanto una buena iluminación resaltara la humedad de la piel y el brillo de las escamas para que el pescado luzca recién cazado. Es decir un tono de luz blanco frio apoya a la presencia de frescura de estos productos.
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